¡Hola a todos los lectores intrépidos! En este artículo vamos a adentrarnos en el mundo de la ansiedad generalizada y vamos a descubrir cómo podemos afrontarla de manera efectiva. Si eres alguien que se preocupa por todo, desde el tiempo que hará mañana hasta si dejaste la estufa encendida, entonces este artículo es para ti. ¡Prepárate para hacer frente a tus preocupaciones y encontrar la paz mental!
- El arte de ser un “preocupón” profesional: es como tener un superpoder innato para anticipar todo tipo de escenarios negativos. Sin embargo, para dominar la ansiedad, necesitamos canalizar esa energía de preocupación en lugar de dejar que nos controle. Acepta tus preocupaciones y reconoce que están ahí para protegerte, pero no dejes que te dominen.
- EL PODER DE LA PERSPECTIVA: Las preocupaciones a menudo nos llevan a imaginar el peor escenario posible en cualquier situación. Aquí está el truco: cuestiona tus pensamientos. Pregúntate a ti mismo/a: “¿Cuántas veces ha ocurrido realmente eso que estoy temiendo?” Te darás cuenta de que tus peores temores son poco probables de suceder. Mantén una perspectiva realista y racional para disminuir la ansiedad.
- HAZ FRENTE A LAS SENSACIONES FÍSICAS: Las sensaciones físicas que genera la ansiedad suelen ser bastante desagradables y por eso las percibimos como algo negativo que queremos eliminar. Pero ahora imagina que estas sensaciones físicas son como las olas del mar. En lugar de luchar contra ellas o intentar que desaparezcan, vamos a aprender a surfear esas olas y sacar provecho de ellas. En lugar de resistir o rechazar las sensaciones, acéptalas como parte de ti. Al hacerlo, estarás desactivando la lucha interna y la intensidad disminuirá.
- DESAFÍA TUS PREOCUPACIONES: Enfrentar tus preocupaciones es un paso fundamental para afrontar la ansiedad. Prueba la técnica de “cuestionar tus preocupaciones”: analiza tus pensamientos y pregúntate si hay pruebas reales que respalden esas preocupaciones. Descubrirás que la mayoría de tus preocupaciones carecen de fundamentos sólidos. Desafiar tus pensamientos te ayudará a ganar control sobre ellos.
- ¡VIVE EL PRESENTE!: La ansiedad tiende a llevarte al futuro, donde las preocupaciones toman vida. Una buena manera de contrarrestar esto es practicar la atención plena.
Enfócate en el presente, en las pequeñas cosas que te rodean: sonidos, colores, olores, etc. Aprende a saborear cada momento y deja que tus preocupaciones futuras se desvanezcan. - BUSCA APOYO Y AYUDA PROFESIONAL: No tienes que enfrentarte a esto solo. Hablar con amigos o familiares de confianza puede aliviar tu carga emocional. Además, considera buscar ayuda psicológica ya que se te proporcionarán las herramientas necesarias para conseguir que esas preocupaciones desaparezcan.
Queridos “preocupones” valientes, la ansiedad no tiene que gobernar nuestras vidas,
¡hagámosle frente!
